Mitos y verdades de la piel en verano
Mito: “Si exfolias la piel se va el moreno o ayudas a eliminarlo.”
Realidad: La exfoliación solo ayuda a eliminar las células muertas y hace que la piel se vea fresca y luminosa. Es muy buena para la piel y es recomendada 1 vez a la semana o cada 10 días.
Mito: “El sol es bueno para el acné”.
Realidad: Los granitos se secan, parece que la piel mejora, pero luego empeora cuando sufre una reacción inflamatoria. Además, genera mucho más sebo para compensar, lo que acaba empeorando la situación.
Mito: “Cuando estamos en el agua el sol no nos afecta.”
Realidad: El agua genera un efecto lupa sobre nuestra piel. Las gotas aumentan la intensidad de la luz solar al menos un 10% y esto supone un riesgo mayor de quemaduras solares. Tras cada baño, es importante secar bien la piel con una toalla y volver a aplicar protector solar.
Mito: “El agua de la piscina y del mar refresca e hidrata la piel.”
Realidad: El cloro de la piscina y el salitre del mar deshidratan la piel. Luego de tomar el baño, es recomendable tomar una ducha y secar bien nuestra piel. Además, es aconsejable limpiar la piel del rostro tras los baños con agua micelar.