5 consejos que deberías aplicar cada mañana para mantener tu piel fresca y radiante
- Limpieza diaria y cuidado hidratante: el pilar más importante y fundamental para un cuidado de piel eficaz. Hay que dejar la piel limpia de toxinas. Lo que hay que hacer es lavarla, usando agua micelar y agua termal. Exfoliar la piel para eliminar las impurezas y la oleosidad. Por último hidratarla con una crema especial para tu tipo de piel.
- Tomar mucha agua: aporta humectación a la piel, lo que logra prevenir las arrugas y la flacidez. ¡Es muy fácil de cumplir! Llévate tu botella de agua a donde vayas.
- Protegerse del sol: una sobreexposición al sol, sobre todo en las horas más peligrosas del mediodía, puede ser contraproducente y dañar nuestra piel, aumentando el riesgo de aparición de manchas, quemaduras y cáncer de piel. Por lo tanto es clave usar todos los días un protector solar contra los rayos UVA y UVB, no importa que sea invierno o esté nublado.
- Dieta balanceada y ejercicio: fun-da-men-tal. Lo mejor es incluir en nuestra dieta alimentos ricos en antioxidantes. Si no tienes tiempo de ir al gym ¡no importa! Muévete lo máximo que puedas. Haz las compras caminando, sube y baja las escaleras de casa, nada en tu pileta. Las opciones son infinitas, solo hace falta voluntad.
- ¡Dormir bien! Aunque muchos lo pasen por alto, este punto es súper importante y debe ser respetado. Al dormir se reparan y crean nuevos tejidos y células, si no respetas las ⅞ horas de sueño, tu cuerpo lo resentirá y así también tu cutis.
¡Una piel saludable, fresca y limpia está a la vuelta de la esquina, solo debes ser constante y dedicarle unos minutos de tu día!